*La mayoría de los políticos carentes de honestidad y ética profesional

Hoy más que nunca la paz se hace necesaria en un México agraviado por la corrupción y en un Michoacán donde los políticos han emprendido una guerra encarnizada de descalificaciones y denostación entre actores y partidos políticos que solo buscan poder y riqueza, y no velar por el bienestar de los ciudadanos, así lo expuso el activista Pedro Fernández Carapia, dirigente de la organización Fuerza Migrante sin Fronteras, durante su participación el evento “Renovando la Paz”, que se desarrolló el viernes pasado en conocido Restaurante de esta ciudad.

En Michoacán dijo, hay mucho que decir del tema, por lo mucho que hemos sufrido los ciudadanos, y donde la violencia se expresa de diferentes formas o modalidades, siendo la más letal la violencia criminal- delincuencial, que está sembrando terror y muerte en todos los rincones del Estado.

El activista y luchador por el bienestar de los migrantes michoacanos, expuso que esta violencia que se da en el Estado, desde los tres niveles de Gobierno, se ha extendido a todos los extractos sociales, incluyendo a los medios de comunicación, ya que muchos comunicadores han pagado con sus vidas las publicaciones en contra del crimen organizado o de gobiernos corruptos.

Explicó que en Michoacán se ha acrecentado la violencia política, sobre todo ahora que estamos en un próximo proceso electoral, donde se ha desatado una fuerte ola de violencia provocada precisamente por la clase política, con sus ataques encarnizados por descalificarse y denostarse unos a otros, ello, por la falta de trabajo y mérito de quienes pretenden un cargo político. Si los políticos utilizaran ese tiempo y dinero en no denostarse y descalificarse, a Michoacán otro gallo le cantara.

Sin embargo dijo, nuestra realidad es otra, porque nuestros políticos carecen de ética y de principios y eso es triste, porque son los propios políticos quienes se andan haciendo pedazos con sus descalificaciones, son quienes en un momento dado toman las decisiones de las políticas públicas que tienen que ver para disminuir la violencia, pero por su mal trabajo son los principales creadores de esa violencia que ha quitado muchas vidas.

Pedro Fernández comentó que también existe la violencia social, esa que se da entre ciudadanos y organizaciones,  por un lado el estado por sus omisiones e ineficacia provoca esa inestabilidad social y es obvio que esas acciones permean a los ciudadanos. Y en cuanto a los migrantes, una forma de violencia es esa proliferación de personas y organizaciones que están cometiendo fuertes fraudes.

Aseguró que hay organizaciones que están defraudando a familias completas, a compañeros migrantes que siguen teniendo la expectativa del sueño americano, de conseguir una visa para buscar una mejor forma de vida en los Estados Unidos, pero terminan siendo abusados por esos grupos fraudulentos que operan al margen de la Ley.

Dio a conocer que por ahí andan algunos personajes descarados, quienes en completo estado de impunidad andan hasta rancheando, convocando a incautos para cobrarles dinero prometiéndoles una visa. Esos vivales y defraudadores ya están siendo investigados para por lo menos ventilar sus nombres.

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