Nuevos impuestos harían daño a la economía michoacana: Cristina Portillo

Nuevos impuestos harían daño a la  economía michoacana: Cristina Portillo

Más allá de las argumentaciones técnicas y jurídicas, se debe entender que el actual momento económico del país y del mundo debe obligar a evitar el cobro de nuevos impuestos en Michoacán, señaló la diputada Cristina Portillo, quien dijo además que el gobierno estatal debe buscar alternativas para financiar el funcionamiento del aparato público, antes que pensar en nuevos gravámenes.

«Los estudiosos de la economía dicen que en momentos difíciles, cómo los actuales, resulta un contrasentido la creación de nuevos impuestos; ello debido a que se le retiran recursos de los bolsillos a las familias y a las empresas, quienes son el principal motor económico», sentenció la legisladora para quién las justificaciones de los impuestos ecológicos pueden encontrarse en la situación de crisis ambiental, pero estos cobros deben formar parte de una visión mucho más integral que únicamente el cobro de un tributo al estado.

«El horno no está para bollos ni las carteras de los michoacanos para nuevos impuestos. El propio ejecutivo reconoce estás dificultades financieras que se han generado por la llamada desaceleración de la economía global, entonces pues lo que necesitamos en este momento es que la gente tenga recursos para poner en movimiento a la economía y no quitarles estos con más impuestos,» apuntó la diputada quien dice pondera su posición respecto a los nuevos impuestos propuestos por el ejecutivo a la luz de las condiciones de la economía nacional y estatal.

La morenista concluyó diciendo que tiene la impresión de que se tomó una excusa «políticamente correcta» en el calificativo de ecológicos a algunos de los nuevos impuestos que quieren cobrarse en la entidad. «Debemos hacer una ruta de trabajo que nos permita revisar la base gravable de cada impuesto, el impacto que tendría en la conducta de los ciudadanos para concientizar sobre el daño al medio ambiente, las políticas públicas que se generarán con los recursos que de ahí salgan, las experiencias exitosas en otros países del mundo; entre otras cosas. Con esos y muchos elementos más, entonces podremos plantear a la ciudadanía una propuesta de gravámenes. Pero creo que se están haciendo las cosas al revés», finalizó.

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